La perspectiva del final cercano me obliga a remar contra corriente en este proceloso río de la vida, a reinventarme en cada momento adaptado a las circunstancias que rodean mi leve existencia.
No dudo ni por un momento que todo es un espejismo, una invención apacible de mi consciencia. Pero es agradable, plácida, somnolienta… ¡Y me gusta!
No dudo ni por un momento que todo es un espejismo, una invención apacible de mi consciencia. Pero es agradable, plácida, somnolienta… ¡Y me gusta!